
El argumento de Dune es de sobra conocido por todos, o al menos para casi todos, así que no ahondaré en detalles sobre el mundo creado por el señor Herbert, pues entiendo que los potenciales lectores de este blog están al corriente de su temática. Y si no es así, ya tardáis en conseguir un ejemplar, pues la novela te sumerge desde las primeras páginas en un universo futuro de casas enfrentadas y guerra sin cuartel.
Pero Dune es mucho más que intrigas palaciegas y aventuras. También es un tratado de filosofía que Frank Herbert ha sabido combinar de manera magistral con un argumento trepidante.
Por último mencionar que el éxito de la novela supuso el inicio de una serie de continuaciones que, si bien de manera irregular, vienen a completar, como ya hiciera Tolkien con su Tierra Media, parte del universo que estaba creando. Concretamente podemos encontrar: mesias de dune, hijos de dune, dios emperador dune, herejes de dune,y casa capitular dune.
En definitiva una buena manera de comenzar otro año literario.
Pues si quieres quedarte con el buen sabor de boca, para. De leer, quiero decir. Dejalo en el primero.
En serio.
Desgraciadamente es algo que ya no se podrá evitar, pues conseguí la colección completa y en un ejercicio de superación alfanumérico (hay que ver lo prolífico de este hombre al escribir página tras página), conseguí terminarme las dos siguientes partes. Efectivamente, dejan mucho que desear con respecto a la primera y más parecen escritas con desgana que con aunténtico espiritu continuador.
Saludos.
Una cosa, es cierto que a partir de ahi comienzan a volverse mas raros y espesos pero creo yo que si te centras en sus puntos fuertes sigue siendo una saga interesante.
Y si te gusta la trilogia de precuelas que hizo su hijo junto con Kevin J. Anderson son bastante buenas (y mucho mas ligeras en estilo que las de Frank).