La tarde pasó y a la noche me reuní con Ángela y Pablo, mis buenos y queridos amigos, para cenar y comentar cosas pendientes, interesantes y prometedoras. Es un lujo contar con su amistad, pues son personas de talento, siempre ocupadas en proyectos ilusionantes.
Al día siguiente, sábado, bien temprano me levanté para estirar las piernas por las cercanías del hotel y prepararme para una jornada que se prometía agotadora. A las 10 en punto estaba de vuelta en el pabellón, listo para apuntarme en alguna partida. No fue cosa fácil, especialmente en la que me gustaba, la aventura que Bester había preparado empleando las reglas de los últimos playtesting de D&D Next. Y digo que no fue cosa fácil porque en apenas 10 minutos, y no exagero, todas las mesas de rol se llenaron, sin plazas libres. Menos mal que, finalmente, y gracias a la amabilidad de Bester, pude hacerme un hueco en su mesa, para, junto a cuatro compañeros bien dispuestos y amables, lanzarnos a explorar la mansión encantada. En fin, la verdad es que ya tenía ganas de probar en mesa todos estos avances en las reglas que se han liberado de D&D Next. Debo admitir que hay nuevas mecánicas interesantes, con un toque clásico nada desdeñable, aunque otras cosas aún me chocan un poco. Será cuestión de seguir el desarrollo de las reglas y cómo finalmente quedan definidas. Ah, estuvimos jugando desde las 10:45 horas hasta casi las 13:30 aproximadamente. Todo muy bien, divertido, y los compañeros genial.
Durante la mañana pude conocer a Sergio alias Tremandur, autor de Jerusalén 1119, un chico majo, agradable con el que pude departir y charlar distendidamente de muchas e interesantes cosas a lo largo del día. Juntos marchamos a comer el sábado, para retornar poco después, ya que debía dirigir a eso de las 17:00.
Como saben, tenía preparada la clásica aventura Hidden Shrine of Tamoachan, en versión torneo. No soy la persona adecuada para decirlo, pero creo que los jugadores se divirtieron. Ante todo, traté de trasmitirles un poco las sensaciones del auténtico dungeon crawl de la vieja escuela. La sesión duró unas dos horas, muy intensas y divertidas por la parte que me toca.
Bueno, el resto de la tarde, y durante todo el día, no paré de saludar, charlar, cotillear con todo quisque (hasta me hicieron una entrevista los chicos de Aker Codicem). Es una cosa que siempre me sorprende gratamente en estas jornadas, la gran cantidad de gente conocida del mundillo que uno termina por encontrarse en las LES, y muchas de ellas acuden de toda España, como es mi caso. No citaré a todos, porque corro el riesgo de dejarme a muchos en el tintero, cosa que no sería justa. Aunque, si me permiten, si me gustaría mentar a Arkerion, jugador en la aventura que dirigí, quien amablemente me regaló un suplemento clásico de AD&D; a Carlos de la Cruz, que hizo lo propio con una copia de Mazes & Minotaurs y a mi buen compañero Alberto Bermudo que terminó por regalarme el libro de marras que necesitaba para completar la ambientación histórica de Walküre. Muchas gracias a los tres, por estos gestos inesperados que no merecemos de seguro. Como he dicho, hubo muchos otros que no citaré pero a los que me gustaría agradecer su simpatía desde aquí.
La noche acabó en una cena entre amigos, buena compañía, donde dí cuenta de un par de mojitos bien cargados. Y a la cama a descansar.
Y aquí que estamos ya en domingo. Y volvimos al pabellón, y aunque no lo tenía planeado, acabé dirigiendo una nueva sesión de juego, con unos voluntariosos jugadores, todos muy majos. La cosa fue bien, creo yo. Tampoco se pudo jugar mucho, ya que al filo de la 1 recogí bártulos para conducir de camino a Lorca, después de despedirme de los asistentes dominicales, que no fueron pocos ni mucho menos.
Poco más que añadir, salvo las fotos que les dejo por orden cronológico, desde el viernes hasta el sábado por la noche. No hice fotos del domingo a la mañana.
Un saludo muy especial para todos los camisetas naranjas, en especial para mi amigo Dani.
La mesa de Holocubierta con sus productos.
Mesa de juego de Exo.
El señor Carlos Plaza, genio y figura, con un compañero.
El gran Alfredo Meroka.
El pabellón, el viernes al poco de abrir sus puertas.
Vista de las mesas de rol el viernes, recién abierto el pabellón.
Las mesas comienzan a llenarse.
José Manuel Palacios a los mandos de una sesión de Tenga.
Juan Carlos Herreros en su stand de Sombra.
Jorge dirigiendo, creo que es Z-Corps.
Más y más mesas.
Rodrigo y su Puerta de Ishtar.
Jon Bandido, de blanco, entre otros.
Y más fotos de la mañana. Todas las mesas sin una plaza libre.
La tarde del sábado fue acojonante, con una afluencia masiva de peña.
A reventar…
Jacobo Peña con su Haunted House.
Y Elwood y Jose Manuel Real, de Roach Room.
Salgo en un par de foticos, que con permisó te robaré, y ahora aprovecho para hacer yo mi propia reseña.
Como ya he dicho antes, un placer enorme conocerte y saludarte. ¡Hasta la próxima ocasión!
Lo mismo digo.
fue un placer conocerle en persona Steinkel, el sábado cuando fui, al volver a casa volví mas risueño que un niño, estas fueron mis primeras LES, y volveré el año que viene, como camiseta naranja, que un compañero de mi asociación me a convencido ( Enrad de la cofradia del dragon ;D)
ademas, muchísimas gracias por firmar mi ejemplar del manual rojo, solo por eso ya mereció la pena ir hasta Alcorcon, una lastima que no quedasen plazas para tu partida del sábado cuando me apunte, pero pude jugar una muy divertida de Pathfinder
Igualmente, Rubén.
Ciertamente hubo mucha gente el sábado por la tarde, y fue todo un placer poder charlar tranquila y distendidamente.
Espero que podamos tener más oportunidades para hablar… y ¡¡todo un descubrimiento esos mojitos!!
Un saludo
Cierto. Y sí, esos mojitos son la leche. Buenísimos. Mano de santo para dormir como un bebe.
Me alegro de haber podido charlar un poquito contigo también este año, Pedro :). Espero que le encuentres un buen lugar a Mazes & Minotaurs en tus abarrotadas estanterías; creo que el libro será feliz en su nuevo hogar ;).
Me alegro que te gustara el libro, disfrutalo…yo disfrute como un enano (nunca mejor dicho) de la partida, con ganas de haber avanzado más y lamentando haberme quedado con la miel en los labios 🙂
Saludetes y gracias por todos los autografos
Arkerion AKA David
Gracias a tí David.
Estubieron cojonudas las LES, os robo una foto que aparece gente de mi asociacion para ponerla en nustro blog, saldra mañana y pondre que os la robo a vosotros con enlace.
Descuida, sin problemas.
Fue un placer cruzarnos, aunque charláramos poco tiempo. 🙂
Igualmente Rodrigo!!!
Fuy uno de los afortunados en poder jugar Hidden Shrine of Tamoachan el domingo por la mañana y quede encantado, nunca habia pasado tanto acojone en una aventura! jajaja! me encanto tu forma de dirigir y muy contento con la partida a pesar de mi cagada al abrir la puerta con cerradura y hacer saltar la trampa sonica! jejeje!
Un placer conocerte y paladear de tu mano el sabor del old school!
El placer fue todo nuestro, gracias por jugar con nosotros!!!
Genial, ya me hubiera gustado ir a mí…
Envidia enorme!! 🙁
Una pena no haber podido ir este año… A ver si el año que viene hay suerte y nos vemos por aquí! 🙂
No esperaba verme en ninguna foto, pero gracias al gran Meroka he quedado inmortalizado xD.
Muy bien todo como siempre. Un saludo a los 3 masters con los que jugué, Meroka, Urox y Geos, que se lo curraron mucho.
Cuando sientes pasión por algo tienes la capacidad de transmitir una parte de tus vivencias personales a los que te rodean.
Eso presencie el sábado cuando cinco aspirantes a héroes se metieron en una ratonera sin salida suplicando por un minuto de vida más.
Las reglas en ese momento no son tan importantes, el master tiene todo el poder en sus manos y sí tienes un fallo, mueres. Así se diseño este maldito juego hace casi cuarenta años y así me gusta jugar.
Quizás no es un juego justo, la vida tampoco lo es, aún así es la versión que más me divierte, la versión vieja del dragones y mazmorras.
Gracias señor de la marca, hay pequeños momentos en la vida que valen mucho.
En el viaje de vuelta a casa comentábamos cómo habías conseguido meternos en situación en pocos minutos y con unas ganas tremendas de terminar ese módulo o probar similares. Que no es un estilo anticuado, sino el que creó esta afición.
Qué buen rato.
A mi también me alegro verte, como todos los años.
Menuda envidia sana me provoca ver estas reuniones multitudinarias de roleros, ojalá las hubiera aquí y fueran tan concurridas, o tuviera estas a tiro de coche 🙂
Una pregunta ¿había gente joven? me refiero a adolescentes, es importante cuidar la cantera y en las fotos no veo ninguna mesa ni jugador de menos de 18 años.