Tras la vorágine navideña, en la Marca del Este comenzamos el año –algo tarde- retomando nuestras habituales sesiones de juego, donde seguimos testeando la caja negra. Un año que promete ser largo y fructífero.

En esta ocasión los jugadores siguen explorando la misteriosa isla, luchando contra enconados enemigos y auxiliando a pobres ancianitas de armas tomar. Ya han superado la primera parte de la campaña y se dirigen prestos a explorar unas antiguas ruinas donde les aguarda la mayor de sus aventuras. ¿Me pregunto cuántos de ellos volverán a ver la luz de un nuevo amanecer?

Patatas y dados rulando, el sonido de la mesa de juego…


Salva calculando las rentas de la sesión de juego y Sibisse tomando nota…


El totum revolutum de la mesa del Narrador…

Para conseguir testear a tiempo toda la caja negra, no podremos fallar, y tendremos que jugar cada lunes de las próximas semanas, por casi dos años, que no es moco de pavo. Ya saben que lo que más nos gusta de todo esto es jugar, jugar y jugar a rol.
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